Aprendiendo sobre tu Nación para no quedar como Pendejón.


El día de hoy en "Aprendiendo sobre tu Nación, para no quedar como pendejón" hablaremos sobre el Presupuesto General de la Nación y otras hierbas interesantes.

Aparte de eso contestaremos algunas de las preguntas más importantes:

¿Hizo mal el Órgano Legislativo en utilizar $500,000 en la colocación de rótulos LED, y un nuevo sistema de votación digital en la Asamblea?
¿Era posible utilizar ese dinero para financiar otros proyectos sociales de mayor importancia y relevancia?
¿Qué puedo hacer yo como ciudadano para que esto no pase de nuevo?
¿Me veo indignado o estúpido cuando publico en FB mi enojo sin saber como funciona mi Gobierno?
¿Cambiaré algo con decirles pendejos a los pendejos que trabajan en la Asamblea o será necesario la más razonable solución de sacar a los pendejos para que no sigan haciendo pendejadas?
¿Cómo puedo sacar a los pendejos de la Asamblea?

Todo esto y más en su edición vespertina de "Aprendiendo sobre tu Nación para no quedar como Pendejón". Empezamos.



El Presupuesto General de la Nación (PGN) es un plan de acción que contiene las estimaciones de ingresos y gastos durante un período determinado de tiempo. En resumen, el PGN es un proyecto completo en el cual se destina pisto para cada área de la Nación en base a sus necesidades y a la coyuntura nacional.

Todo PGN se elabora y se aprueba en el año previo. Por ejemplo, todo el pisto que está siendo “invertido” en estos momentos en todas las instituciones de Gobierno fueron aprobadas el año pasado.



No específicamente. En Septiembre del 2015 se aprobó el presupuesto de la Asamblea Legislativa con el respaldo de todos los partidos políticos. Dentro de este presupuesto se describía el uso de $500,000 para la realización del proyecto llamado "Modernización del Salón Azul de la Asamblea Legislativa." 

Lo que se aprobó fue el proyecto, las especificaciones del proyecto se dieron a conocer al público hasta después. Contrataron a Omni Music S.A. de C.V. para cumplir con éste contrato que incluía gastos por las Unidades de Votación, las famosas Pantallitas LED y una pantalla de 90 pulgadas para la presentación de los resultados de las votaciones que en total ascendían a $499,315.

Pero volviendo al tema; ¿sabían ustedes que el Ministerio de Hacienda tiene otras oficinas aparte de las de Tres Torres? Se los digo porque si quieren echarle la culpa a alguien de lo desastroso que es la distribución del PGN no se vayan a meter a Tres Torres, vayan al Centro de Gobierno. Ahí está localizada la Dirección General de Presupuestos (DGP).

Esta oficina es la encargada de realizar la Política Presupuestaria cada año. La Política Presupuestaria es un documento que tiene dos funciones principales:
1) Decirle a las instituciones “más o menos” cuanto pisto tendrán.
2) Decirle a las instituciones en qué cosas pueden y en qué cosas no pueden gastar.

Después de que el Ministerio de Hacienda crea la Política Presupuestaria, el Ejecutivo (Presidente y Consejo de Ministros) aprueban el documento y lo envían nuevamente a la Dirección General de Presupuestos para que se lo mande a cada institución pública y que en base a este documento tan poco específico y con tantos vacíos teóricos puedan crear sus propios proyectos de presupuesto institucionales.

Cuando cada institución termina su presupuesto con la misma vaguedad que tiene la Política que los rige, se lo mandan nuevamente al Ejecutivo, quien lo aprueba y lo pasa a la Asamblea Legislativa, quien lo aprueba y lo publica en el Diario Oficial.


Sí.



La versión corta es porque son unos hijos de puta.

En la versión medianamente larga el Ejecutivo tiene que darle su brazo a torcer al Legislativo porque es el primero que entra en el ojo de la crítica pública cuando no hay dinero porque no se aprueba el Presupuesto. El Director General de Presupuestos es solo el mensajero entre todos estos huevones y el Legislativo (Los Diputados) pueden hacer y deshacer si no se les cumplen todas sus exigencias. El Consejo de Ministros debe aprobar también porque sino se quedan sin dinero para funcionar adecuadamente. 

En resumen, todos se deben poner de acuerdo para sacar ventaja de sus propios presupuestos; no es coincidencia que en línea puedas encontrar la Política Presupuestaria pero no puedas encontrar absolutamente ningún documento de los presupuestos de cada institución pública.

Ahora vamos a ver a detalle lo que dice la Política Presupuestaria del 2016.

Habla al principio sobre la importancia del Desafío Nacional de lograr una estabilidad macroeconómica y financiera que permita acelerar el crecimiento económico, la inversión y la generación de empleo. Le dedica también un par de líneas a la reducción de la pobreza y la desigualdad, a mejorar la seguridad y a fortalecer la democracia y el Estado de derecho.

Para que comprendan bien este capítulo de la Política Presupuestaria, es exactamente igual a la verborrea que todos han escrito en los marcos teóricos de sus trabajos de graduación o tesis. Un montonazo de términos que en teoría deberían ser útiles pero que al pasarlos a la práctica solo sirven para que la tesis tenga al menos unas 20 páginas más.

En teoría sirve para guiar a las instituciones públicas a realizar un presupuesto centrado en los valores que rigen al Gobierno Central. Para no hacerla muy larga todos los presupuestos deben ir encaminados al “buen funcionamiento de la Institución”, sin embargo en ningún momento la Política Presupuestaria define o especifica qué clase de gastos son aceptables o no en cada Institución. 

Cada una de las instituciones es la responsable de decidir en qué gasta su dinero. Con toda la libertad del mundo pueden definir en el presupuesto que van a realizar un proyecto cualquiera, y dentro de la ejecución del proyecto utilizar unos $5,000 en alcohol. 

Lo mejor de todo no es que ellos deciden, sino que bajo el ojo de la legalidad están en su pleno derecho y no están cometiendo ningún delito. Los gastos de celebraciones para los empleados entran en el presupuesto de la manera más legal posible. Así que cuando aparece la Corte de Cuentas gastando $43,000 en refrigerios para el mes de Febrero-2016 y dicen que todas las compras las hicieron apegadas a la ley, TIENEN TODA LA RAZÓN DEL MUNDO.


Dale, pero no arreglás nada con eso. Pero ya que estamos con pendejadas hablemos de la pendejada más grande de todos los que reclaman vía "feis". Existen diferentes rubros dentro del PGN, y lo importante de esto es que el dinero destinado para un rubro NO PUEDEN SER TRANSFERIDOS A OTRO RUBRO.

Esta es la parte en la que hablamos de dinero:

Existe pistito específicamente destinado para cada uno de los tres Órganos del Estado:

  • El Órgano Legislativo 59 millones.
  • El Órgano Judicial 265.5 millones.
  • El Órgano Ejecutivo 2,900 millones.
    • Presidencia: 128 millones
    • Hacienda: 110 millones
    • Relaciones Exteriores 44 millones
    • Defensa Nacional 146 millones
    • Gobernación 22 millones
    • Justicia y Seguridad Pública 443 millones
    • Educación 942 millones
    • Salud 627 millones
    • Trabajo 13 millones
    • Economía 100 millones
    • Agricultura y Ganadería 73 millones
    • Obras Públicas 200 millones
    • Medio Ambiente 22 millones
    • Turismo 24 millones

Todas estas cifras son los techos de los presupuestos para cada Institución. Esto significa que cada presupuesto no puede pasarse de esa cifra; y más importante aún significa que cada uno de estos números es fijo para cada institución. No es posible transferir fondos de un rubro a otro.


Exactamente, no es posible transferir fondos media vez el presupuesto se encuentre aprobado. Aunque los $500,000 hubieran quedado intactos este pisto simplemente regresaría a las arcas de Hacienda a finales del año fiscal y se reutilizaría en el presupuesto nuevo del próximo año.

Ya el MINSAL tiene su presupuesto que ellos mismos hicieron para cubrir todas esas demandas. De la misma manera MINED tiene su propio presupuesto que ellos mismos hicieron para cubrir todas esas demandas. Y así sucesivamente por los siglos de los siglos.

El dinero alcanza cuando nadie se lo roba. (Esto no es un mensaje patrocinado por Gobernación de San Salvador.)



Claro que sí se puede hacer mucho. No es suficiente hacer trending de #NoTeIndigna o pretender organizar a la población en un grupo apartidario, o hacer alarde de lo mucho que me enoja todo lo que sucede.

Existen mecanismos de presión popular y mecanismos democráticos para evitar que estas cosas sigan sucediendo. Como pudieron observar todo esto es un proceso que depende tanto del Ejecutivo como del Legislativo. Que mejor castigo que demostrar en las elecciones nuestro descontento con las decisiones de los Diputados. Y ahí entra en juego el tema del que hablaremos la próxima semana: ¿Me sirve de algo votar por partido o debería tomarme mi tiempo para votar por rostro?.

Hasta la próxima.

1 comentario:

Unknown dijo...

Excelente analisis y se agardece la informacion que muchos desconocemos y es tan necesaria abordar ya que nos afecta a todos, siempre lo he dicho somos culpables de una manera u otra de la situacion en la que vivimos ya que solo nos escudamos detras de un teclado y una pantalla para expresar nuestra inconformidad y no tenemos las hagallas de actuar. Aplaudo este blog interesantisimo articulo..